Continuación Carta de Chiva (II Parte):

Et fue entre los ditos moros ordenado que tuviesen [açerca], quando el dito don Berenguer d’Entenza exiría con la cavalgada e sería attentado en el dito pueyo, que todos los moros de la çiudat de Valencia et de los otros lugares del regno fiziesen en tal manera que commo el día sería claro todos fuesen derredor del dito pueyo, e que asitiasen aquí el dito noble e todos los que con él fuesen, la qual cosa fue fecha segúnt que entre ellos fue ordenado.
Et commo vino el día claro, que el dito noble vido que era asitiado en el dito pueyo, fizo mandamiento a hun clérigo qui era del concexo de Daroca que celebrase e dixiese misa.
Et commo aurían oýdo misa, e aurían Dios pregado, que confesasen los unos de los otros; et depués que firiesen en los moros.
El qual misancantano començó a dezir misa; et commo huvo santificado e levantado el cuerpo de Ihesu Christo, e lo huvo posado sobre los corporales, el dito cuerpo de Ihesu Christo se convirtió en verdadera sangre, de la qual cosa todos fueron muncho maravillados qué significava.
Et fue asín entre el dito noble e las otras companýas que con él eran, que el dito misancantano se vistiés hun tavardo de escarlata muyt bello e honrrado, e puyase e cavalgase en hun mulo blancho que alý era, e que levase commo más honrradament pudiese los ditos corporales; et que devallasen del pueyo por ferir en los ditos moros.
La qual cosa fue fecha segúnt que por ellos fue ordanado; et davallado del pueyo en la forma desús dita el dito noble e las companýas de los ditos concellos que con él eran començaron a ferir en ellos. Et los ditos moros començaron a foyr, en asín que los christianos con la gracia del nuestro sennyor Ihesu Christo huvieron grant victoria contra los ditos moros, et mataron-ne munchos, et cativaron-ne.
Et en aprés cascuna de las ditas universidades deseavan e querían aver los ditos corporales, et echaron suertes entre los ditos conçejos de qui serían los ditos corporales e reliquias. Et cayó la suert a los de Darocha por tres vegadas. En asín que fue contención entre ellos que con art se avían echado las suertes.
Et por partir contención ordenaron entre ellos que el dito misacantano cavalgando en el dito mulo, e levando con sý con muyt grant reverencia los ditos corporales, e que fuese delant toda la gent. Et en qualque lugar que el dito mulo con los ditos corporales, por voluntat del nuestro sennyor Ihesu Christo endreçás que los ditos corporales fuesen de aquell lugar; el qual caminando se’n de fué derechamente a una eglesia que es çerca de la villa de Darocha, la qual es appellada Sant Marcho, et fincó aquí los genollos por voluntat de Ihesu Christo.
Et la hora el dito noble e las companýas que con él eran, vidiendo que voluntat era de nuestro Sennyor que los ditos corporales fuesen de la universidat de Darocha, con gran humildat e devoción e con grant procesión fueron posados aquí.
Et por las quales razones Miramomanil, que la hora era enperador de los moros, fizo obrar e hedificar en el dito pueyo el castiello de Chiva, el qual depués el sennyor rey don Jayme, de alta recordación, qui conquirió el regno de Valencia, dio al dito noble don Berenguer d’Entença el dito castiello, en el qual castiello el dito noble, en reverencia del nuestro sennyor Ihesu Cristo e de la sua beneyta Santa Madre, sobre una losa en la qual el dito miraglo esdevino, fiço hedificar una capiella de la bien aventurada sennyora Santa María.
Et sobre aquella losa fizo fer hun altar, en el qual contínuament e por todos tiempos se canta por cascún día misa. Et en aquella capiella vienen munchos romeos e fazen aquí romerías. Et aquí son fechos a los clamantes munchos de miraglos, por voluntat del nuestro sennyor Ihesu Cristo. Et encara munchas de vegadas se es esdevenido por voluntat del nuestro Sennyor que y han oýdo de noch los que en el dito castiello habitan, grandes cantos en la dita capiella e lumbres, e an trobado las lámpadas que aquí son, que las avían lexadas sines de lumbres encendidas, e con lumbre. Et en aquellos cantos, muyt grandes, loando la bien aventurada Santa María, madre del nuestro sennyor Ihesu Cristo.
Et en testimonio de verdat e de las ditas cosas, fazemos fer aquesta carta pública testimonial.
Et a mayor firmeza nos sobreditos don Guillem Serra, e don Bernat de Alcoleia rector, et el justicia e los jurados e el concejo del dito lugar, los siellos nostros pendientes y posamos.
Dada en Chiva, jueves pridie nonas julii anno Domini millesimo trescentesimo quadrigesimo.
Signo de mí, Domingo de Ahuero, notario público de Chiva, que aquesto escreví por mandamiento a mí fecho de los sobreditos, e a todas las cosas por los sobreditos a los homnes antiguos del dito lugar demandadas, asín a christianos commo a moros, present fiç, con sobrepuesto en la Vª regla, do dize «per sarracenos».
JCM
Fecha de publicación: 19/10/2021